Es la primera sala de exposiciones de la compañía en la región de Oriente Medio y África que se remodela con la nueva identidad visual de Rolls-Royce, que se lanzó oficialmente en Londres y Shanghái en 2021.
La nueva identidad visual del showroom ofrece a los clientes una experiencia totalmente inmersiva que les lleva al corazón de la marca y a todo lo que representa.
En TRISON estamos orgullosos de haber participado en la digitalización de este nuevo showroom, que consolida la posición de Rolls-Royce como una verdadera Casa de Lujo.
El proyecto de RRMC consta de la instalación de varias pantallas LED de grandes dimensiones dentro del concesionario. El tamaño de estas pantallas depende de la disposición del coche. Cada coche tiene una lista de contenidos adaptada y personalizada, aumentando así la experiencia y focalizando cada zona del concesionario en un modelo diferente.
El concesionario consta también de 2 zonas de proyección de uso únicamente nocturno. Una de estas soluciones proporciona una proyección sobre un vinilo transparente adherido al escaparate del concesionario. Durante el día, el escaparate muestra su interior sin entorpecer la visión, pero, por la noche, este vinilo permite la proyección sobre el mismo formando una imagen de gran formato en el propio escaparate. La otra solución de proyección trata de un video mapping sobre unas pantallas de proyección alrededor del coche. En esta zona, también se encuentra unos sensores que detectan cuando alguna persona se acerca al escaparate. En este momento, la proyección se para y la iluminación sobre el coche toma protagonismo dando mayor visibilidad al vehículo.
Además, se integran monitores de gran formato en varias salas del espacio, tanto para aumentar la experiencia en el cliente como soporte para las tareas de ventas.
El espacio al completo incluye un hilo musical para agradar la experiencia inmersiva audiovisual y hacer de su visita al concesionario aún más placentera.
Todo este sistema audiovisual de última generación es controlado a través de una pantalla táctil con un interfaz customizado, siguiendo los estándares y necesidades del cliente. Además, para facilitar la operativa diaria del espacio, el concesionario está automatizado en prácticamente todas sus variantes, para que el personal del espacio no tenga que preocuparse de los sistemas audiovisuales, sino, simplemente, de disfrutarlos.